Sabiéndonos rotos y vulnerables

En nuestro entorno, en publicidad, en Instagram, en Facebook, en todos lados hemos escuchado y visto esta frase: ‘’Tú puedes con todo’’ frase que se usa mucho para hacernos sentir que solos, no necesitando de nadie podremos lograr muchas cosas, lograr cierto éxito personal interno.

Sabemos que en el reino De Dios esto no funciona así, pero siendo honesta muchas veces me he encontrado apropiándome de esta frase, me he encontrado en esta situación queriendo poder con todo, con mis emociones, con mis problemas, queriendo lidiar conmigo misma pretendiendo que ‘’puedo con todo’’ y sabes , hace unas semanas me di cuenta de que había caído sutilmente en la manera de pensar de este mundo.

Me daba miedo reconocer que no podía, me daba miedo reconocer que aún había faltas de carácter en mí, que quería omitir creyendo que podría sola lidiar con todo esto. Días después de haberme sentido de esta manera el Señor me confrontó recordándome esto:

La vulnerabilidad se opone a la autosuficiencia

Esto fue una pura muestra de amor y misericordia del Padre, así como cuando un doctor opera a una persona de algo maligno en su cuerpo, así el Señor quiere operar en nuestros corazones. Él sigue mostrando su cuidado, exponiendo y tratando con nuestro pecado, nos sigue transformando.

Él conoce nuestro corazón, conoce nuestros pensamientos, conoce todo de nosotros pero aún así Él desea que nos acerquemos como hijos y que podamos ser transparentes, porque ¿quién mas nos comprenderá si no es nuestro Jesús?

‘’Porque no tenemos un Sumo Sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas, sino Uno que ha sido tentado en todo como nosotros, pero sin pecado.’’ Hebreos 4:15

Y así como Él nos invita a ser vulnerables con Él, también nos invita a serlo con otros, con personas maduras en la fe.

‘’Por eso, confiésense unos a otros sus pecados, y oren unos por otros para ser sanados.’’ Santiago 5:16

Pareciera también difícil hacerlo pero es necesario. En el momento que yo lo hice experimenté libertad y claro, me sentí desnuda y expuesta, pero la libertad que pude experimentar después de hacerlo no tiene comparación, el Señor me confrontó pero así como me confrontó también me confortó con Su inmenso amor y Su inmensa gracia.

Busquemos ser humildes como Cristo dejando nuestro orgullo y acercándonos confiadamente.

Él anhela que tú y yo podamos echar mano de ese acceso que tenemos al Padre a través de Cristo y podamos sabernos rotos y vulnerables en Su Presencia y saber que nuestra incapacidad nos capacita para entrar al lugar secreto.

‘’Por tanto, acerquémonos con confianza al trono de la gracia para que recibamos misericordia, y hallemos gracia para la ayuda oportuna.’’ Hebreos 4:16

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